La ceremonia religiosa se concretó ayer en un imponente altar que se erigió sobre avenida Rivadavia donde se ubicó la imagen de San Pedro Nolasco a quien la Virgen inspiró a la creación de esta orden religiosa, la Virgen de La Merced y San Nicolás.
Los preparativos comenzaron en las primeras horas de la tarde. En primer lugar, arribaron las distintas advocaciones de la madre de Dios en procesión, acompañadas por fieles católicos, ubicándose al costado derecho de la avenida Rivadavia.
De esta manera, alrededor de 300 adolescentes que están realizando su catequesis en la parroquia, hicieron un cordón a los costados de la avenida para recibir a la patrona de la parroquia de Fátima, luego la Inmaculada Virgen María patrona de la parroquia Espíritu Santo, Virgen de la Merced (Sanagasta), Virgen de Guadalupe (parroquia Santa Rita), Virgen de la Medalla Milagrosa, María del Rosario de San Nicolás, del convento Santo Domingo, Virgen de Copacabana, de la Comunidad Boliviana, Nuestra Señora de la Anunciación del Señor, Virgen de Schoenstatt, Virgen del Valle de la Vicaría de la Resurrección. El interior estuvo representado por la Virgen de La Merced (departamento Castro barros); Virgen de Lourdes y San Ramón del departamento Juan Facundo Quiroga.
A continuación se rezó el rosario, recibiéndose las imágenes de San Nicolás acompañada por curas y fieles de la Catedral y luego la Virgen de La Merced. La Función Ejecutiva estuvo representada por la vicegobernadora Teresita Luna acompañada por el concejal Enrique Rodríguez, el secretario de Asuntos Municipales Alejandro Van Muylen entre otros funcionarios provinciales y municipales.
La ceremonia fue presidida por el obispo Roberto Rodríguez, religiosos, fray Pablo Bernardo Ordoñez, el arzobispo de Resistencia, Fabriciano Sigampa. El canciller del Obispado, Dr. Pedro Goyochea, leyó el decreto de elevación canónica de la parroquia a Santuario Mariano Diocesano Madre de La Merced, designando como rector del santuario a fray Héctor Escudero quien luego efectuó el juramento de fidelidad.
La celebración concluyó con las palabras del obispo Roberto Rodríguez, quien recordó que en 1597 llegaban a esta tierra los frailes mercedarios, trayendo a su patrona. Fueron los primeros que evangelizaron, por lo tanto, esta Orden está enraizada en el pueblo riojano. Elevamos a la categoría de santuario para que sea un centro, un lugar de encuentro del pueblo riojano en torno a su madre", agregó.
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